lunes, 11 de mayo de 2015





VELOCIDAD EN EL DESPLAZAMIENTO AL TROTE DE TRABAJO, DEL CABALLO IBEROAMERICANO
Ing. Guido Seravalli Bravo MSc.
Director Ejecutivo/Asoibero
Juez Oficial Asoibero

En la actualidad, una de las características de nuestra raza que más se ha discutido en los últimos tiempos, es la relacionada con la ejecución del  trote, principalmente en lo que atañe a la velocidad de sus dos tiempos de batidas por diagonales, así como su avance o desplazamiento.

Se ha ratificado desde el inicio de nuestra asociación, que el trote de nuestra raza debe tener elevaciones contundentes, tiene además que mostrar buen ritmo pero ante todo cadencia, la impulsión proveniente del tren posterior debe ser claramente manifiesta, pero permitiendo un confortable asiento y un moderado avance.

Los caballos Iberoamericanos, deben accionar al trote de trabajo, o sea el animal debe ir sutilmente apoyado en el bocado, pero sin llegar a ser reunido, repicado o precipitado. Por el otro lado, a aquellos animales que presenten una mecánica eléctrica, sin cadencia y excesivamente rápida, sea  en la velocidad de las batidas que marcan los 2 tiempos diagonales, dados por sus cuatro remos, o mucha velocidad en el avance, se les deberá rebajar cierto puntaje en la ponderación general a la hora de un juzgamiento; igualmente con aquellos caballos de acción muy plana o sin impulsión.

En las categorías de diestro o “haladas”, los animales deben presentarse en el ring a una velocidad moderada, no muy rápido como suele suceder en otras razas, ni demasiado reunido, de tal manera que el caballo cuente con un mejor tiempo para la suspensión, flexión y elevación de sus bípedos pero cadenciosamente.

 Es común observar a algunos presentadores, abusar del uso de la fusta o látigo, con animales que no necesitan de dicha ayuda, perjudicándolos en lugar de ayudarlos.

El presentador debe mantener el contacto a la mano con su animal en todo momento (apoyándose en su vos), por lo que la distancia entre él y su animal no debería exceder los 2 o 3 metros aproximadamente; posicionándose al lado de la cabeza del potro (a) durante el desplazamiento, no al frente ni atrás.  Ojalá presente una correcta flexión y posicionamiento de cabeza y cuello, con lo que mejorará el arremetimiento de su tren posterior bajo la masa y con ello su impulsión y avance.


Cada criador y expositor, debe entrenar adecuadamente a su animal (es) y con el debido tiempo, decidiendo como acciona de manera más correcta cada uno de ellos, eso sí, de acuerdo con los límites dictados por nuestro Patrón Racial.

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